Huracanes, tifones, ciclones tropicales o baguios


Ciclones Tropicales: Huracanes

Imagen satelital del huracán Katrina, en el Golfo de México.

Imagen satelital del huracán Katrina, en el Golfo de México.

El término «huracán» tiene su origen en el nombre que los indios mayas y caribes daban al dios de las tormentas, pero este mismo fenómeno meteorológico es conocido en el Océano Índico y en el Pacífico Sur (como en la India) con el nombre de «ciclón«, en las Filipinas se le denomina «baguio«, en el oeste del Pacífico norte se le llama «tifón«, en el Atlántico Occidental y el Pacífico Oriental “huracán” y en Australia «Willy-Willy«. Estos términos identifican un mismo fenómeno meteorológico.

Los huracanes y tifones son el mismo tipo de tormentas que los «ciclones tropicales» (el nombre local de las tormentas originadas en el Caribe y en la región del Mar de China, respectivamente).  Los ciclones tropicales se clasifican de acuerdo a la velocidad de sus vientos: depresión tropical (bajo las 38 mph o los 65 km/h), tormenta tropical (entre las 38   y las 73 mph) o huracán (sobre las 73 mph o 110 km/h).

Tifón Rammasun, Japón.

Tifón Rammasun, Japón.

El huracán es un tipo de ciclón tropical,  término genérico que se usa para cualquier fenómeno meteorológico que tiene vientos en forma de espiral y que se desplaza sobre la superficie terrestre. Generalmente corresponde a un centro de baja presión atmosférica y de temperatura más alta que la que hay inmediatamente alrededor. 

    En forma sencilla, es un viento muy fuerte que se origina en el mar, que gira en forma de remolino acarreando humedad en enormes cantidades, y que al tocar áreas pobladas, generalmente causa daños importantes o incluso desastres.

Origen y características principales

Los ciclones tropicales constituyen una clase especial de grandes sistemas de vientos en rotación y poseen características únicas de circulación, completamente distintas de los sistemas ciclónicos típicos de latitudes medias y de los tornados de escala menor, de las trombas marinas y de los remolinos de polvo. Tiene una circulación cerrada alrededor de un punto central. Rotan en sentido contrario a las agujas del reloj en el Hemisferio Norte y en el sentido de las agujas del reloj en el Hemisferio Sur. 

Origen y formación de un huracán.

Origen y formación de un huracán.

Un huracán funciona como una máquina sencilla de vapor, con aire caliente y húmedo proveyendo su combustible. Cuando los rayos del sol calientan las aguas del océano, el aire húmedo se calienta, se expande y comienza a elevarse como lo hacen los globos de aire caliente. Más aire húmedo remplaza ese aire y comienza ese mismo proceso de nuevo.

Los ciclones se forman y se intensifican cuando están situados sobre océanos tropicales o subtropicales en ambos hemisferios, en donde la fuerza de rotación de la tierra (Coriolis) es suficientemente fuerte para que se inicie el movimiento de rotación alrededor del centro de baja presión y cuyas temperaturas de agua a nivel de la superficie son de 27° C o más cálidas. Las regiones matrices no son estables en cuanto a su ubicación, ya que ésta obedece a la posición de los centros de máximo calentamiento marítimo, los que a su vez están influidos por las corrientes frías de California y la contracorriente cálida ecuatorial en el océano Pacífico, así como por la deriva de las ramificaciones de la corriente cálida del «Gulf Stream». Además, no se mantienen por sí mismos sobre tierra, independientemente de la temperatura superficial.

Infografía sobre huracanes

Infografía sobre huracanes

Tienen un núcleo central cálido, se desarrollan en entornos de débiles cortantes del viento vertical y su parte central se inclina sólo ligeramente.

Los huracanes, normalmente  entre 8 y 10 kilómetros de alto y de 500 a 100 km de ancho, pero su tamaño puede variar considerablemente: los pequeños pueden medir sólo 40 km de diámetro y los más grandes entre 600 y 800 km.

Los huracanes más gigantescos se forman en el Océano Pacífico y pueden medir hasta 1.700 km de diámetro.         

Etapas de Evolución 

Etapas de formación de un Huracán.

Etapas de formación de un Huracán.

La evolución de un ciclón tropical puede llegar a desarrollar cuatro etapas:

  1. Perturbación Tropical: Zona de inestabilidad atmosférica asociada a la existencia de un área de baja presión, la cual propicia la generación incipiente de vientos convergentes cuya organización eventual provoca el desarrollo de una depresión tropical.
  2. Depresión Tropical: se caracteriza porque el viento empieza a aumentar en superficie con una velocidad máxima (media en un minuto) de 62 km/h o menos; las nubes comienzan a organizarse y la presión desciende hasta cerca de las 1000 hpa (hectopascales).
  3. Tormenta Tropical: El incremento continuo de los vientos provoca que éstos alcancen velocidades sostenidas entre los 63 y 118 km/h. Las nubes se distribuyen en forma de espiral y empieza a formarse un ojo pequeño, casi siempre en forma circular, y la presión se reduce a menos de 1000 hpa. Cuando el ciclón alcanza esta intensidad se le asigna un nombre preestablecido por la Organización Meteorológica Mundial.
  4. Huracán (madurez): es un ciclón tropical en el cual los vientos máximos sostenidos alcanzan o superan los 119 km/h hasta el máximo de la velocidad, pudiendo llegar a 370 km/h. El área nubosa cubre una extensión entre los 500 y 900 km de diámetro, produciendo lluvias intensas. El ojo del huracán alcanza normalmente un diámetro que varía entre 24 y 40 km, sin embargo, puede llegar hasta cerca de 100 km; es una área de calma libre de nubes. La intensidad del ciclón en esta etapa de madurez se gradúa por medio de la escala de Saffir-Simpson.
  5. Disipación (fase final). Este inmenso remolino es mantenido y nutrido por el cálido océano hasta que se adentra en aguas más frías o hasta que entra a tierra firme, situación ésta última en la que el ciclón pierde rápidamente su energía y empieza a disolverse debido a la fricción que causa su traslación sobre el terreno.

Antiguamente, cada ciclón se denominaba con el nombre del santo del día en que se había formado o había sido observado. Durante la Segunda Guerra Mundial se usó un código en orden alfabético para facilitar la rapidez de la transmisión con abreviaturas, (Abbler, Baker, Charlie, etc.); posteriormente, en 1953 el Servicio Meteorológico de los EUA adoptó el uso de nombres de mujer de esas abreviaturas en orden alfabético y en 1978, a solicitud de un movimiento feminista de los EUA, fueron también incluidos en esas listas nombres de hombre en los idiomas español, francés e inglés. Cabe aclarar que si un ciclón ocasiona un impacto social y económico importante a un país, el nombre de este ciclón no volverá aparecer en la lista.

El ojo del Huracán

El ojo de un huracán puede medir hasta 80 km de diámetro.

El ojo de un huracán puede medir hasta 80 km de diámetro.

El ojo es un área de relativa calma en el centro de un huracán, que se extiende desde el nivel del mar hasta la parte superior y está rodeado por una pared de nubes espesas cargadas de lluvia. En el interior del ojo, sin embargo, debido a la alta temperatura y la presencia de viento caliente, el agua evaporada es arrastrada rápidamente hacia arriba, originándose un aire seco, incapaz de condensarse, y por ende sin nubes. Esto es lo que más llama la atención al observar el huracán desde un satélite.  
     Mientras mayor es el huracán, más nítidamente se aprecia su ojo, salvo que se hayan formado nubes muy altas que impidan su visualización. 

Ojo y escudo nuboso del huracán Katrina, 2005.

Ojo y escudo nuboso del huracán Katrina, 2005.

     La pared del ojo es una zona donde se encuentran dos fuerzas opuestas: la fuerza del aire que se mueve hacia el centro y la fuerza centrífuga que es hacia afuera. En la pared del ojo se encuentran los vientos  más intensos y allí se originarían los tornados. La presencia de ojo y pared diferencian al huracán de una tormenta tropical (que no tiene ojo y que además sus vientos sonde menor velocidad).  El tamaño del ojo no siempre es proporcional a la magnitud del huracán, aunque los más grandes se han visto en los de categoría 4. 

El ojo de un huracán mide generalmente entre 25 y 35 km, aunque puede variar mucho. El ojo de los huracanes del pacífico, donde los ciclones tienen más agua que recorrer antes de tocar tierra, tiende a ser de los más grandes del mundo, con un diámetro aproximado de 80 km. 

Los vientos más fuertes se dan en los niveles bajos, donde el contacto con la superficie terrestre origina una fuerte disipación por rozamiento. Esta disipación aumenta con la potencia de orden dos de la velocidad del viento y por esta razón los ciclones tropicales pueden ser muy destructivos.

Es así, que los elementos propicios para que se forme un huracán son los siguientes:

1.TEMPERATURA SUPERIOR A LOS 80 F:

       A esa temperatura, el agua del océano se está evaporando al nivel acelerado requerido para que se forme el sistema. Es ese proceso de evaporación y la condensación eventual del vapor de agua en forma de nubes el que libera la energía que le da la fuerza al sistema para generar vientos fuertes y lluvia. Y como  en las zonas tropicales la temperatura es normalmente alta, constantemente originan el segundo elemento necesario:

2. HUMEDAD:

      Como el huracán necesita la energía de evaporación como combustible, tiene que haber mucha humedad, la cual ocurre con mayor facilidad sobre el mar, de modo que su avance e incremento en energía ocurre allí más fácilmente, debilitándose en cambio al llegar a tierra firme.

 3. VIENTO:

     La presencia de viento cálido cerca de la superficie del mar permite que haya mucha evaporación y que comience a ascender sin grandes contratiempos, originándose una presión negativa que arrastra al aire en forma de espiral hacia adentro y arriba, permitiendo que continúe el proceso de evaporación. En los altos niveles de la atmósfera los vientos deben estar débiles para que la estructura se mantenga intacta y no se interrumpa este ciclo.

4. GIRO o «spin»:

    La rotación de la tierra eventualmente le da movimiento en forma circular a este sistema, el que comienza a girar y desplazarse como un gigantesco trompo. Este giro se realiza en sentido contrario al de las manecillas del reloj en el hemisferio norte, y en sentido favorable en el hemisferio sur.

Clasificación y medición

Escala Saffir-Simpson

Escala Saffir-Simpson

Los huracanes se clasifican de acuerdo a la escala Saffir-Simpson; ésta, es es una escala que clasifica los huracanes según la intensidad del viento, desarrollada en 1969 por el ingeniero civil Herbert Saffir y el director del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, Bob Simpson.

La escala original fue desarrollada por Saffir mientras pertenecía a una comisión de las Naciones Unidas dedicada al estudio de las construcciones de bajo coste en áreas propensas a sufrir huracanes. En el desarrollo de su estudio, Saffir se percató de que no había una escala apropiada para describir los efectos de los huracanes. Apreciando la utilidad de la escala sismológica de Richter para describir terremotos, inventó una escala de cinco niveles, basada en la velocidad del viento, que describía los posibles daños en edificios.

Saffir cedió la escala al Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos; posteriormente Simpson añadiría a la escala los efectos del oleaje e inundaciones. No son tenidas en cuenta ni la cantidad de precipitación ni la situación, lo que significa que un huracán de categoría 3 que afecte a una gran ciudad puede causar muchos más daños que uno de categoría 5 pero que afecte a una zona despoblada.

OT – Onda Tropical Daños Minimos

Una vaguada o máxima curvatura ciclónica sumergida en la profunda corriente de los alisios del este; se desplaza al oeste, con tendencia a formar circulación de baja presión.

PT – Perturbación tropical Daños Moderados

Un sistema separado de convección bien organizada, que se origina en los trópicos o subtrópicos, que tiene carácter migratorio no frontal y que conserva su identidad, por lo menos 24 h.

DT – Depresión Tropical – 62 km/h Localmente destructivo

Un ciclón tropical con circulación del viento en superficie, en sentido contrario de las manecillas del reloj, con velocidades máximas de 62 km/h.

TT – Tormenta tropical – 63 – 117 km/h  Destructivo

Un ciclón tropical bien organizado, de núcleo caliente, en el que el viento en máximo en superficie es de una intensidad de 63 a 117 km/h.

Huracán – 117 km/h – Altamente destructivo

Un ciclón tropical de núcleo caliente, en el cual el viento máximo en superficie (media durante un minuto) es igual o mayor a 118 km/h. Existen 5 categorías:

Efectos de las diferentes categorías de huracanes.

Efectos de las diferentes categorías de huracanes.

Huracán Categoría I – 118 – 153 Km/h – Altamente destructivo

Vientos de 74 a 95 millas por hora (64 a 82 nudos). Presión barométrica mínima igual o superior a 980 mb (28.94 pulgadas). Danos principalmente a árboles arbustos y casas móviles que no hayan sido previamente aseguradas. Daños ligeros a otras estructuras. Destrucción parcial o total de algunos letreros y anuncios pobremente instalados. Marejadas de 4 a 5 pies sobre lo normal. Caminos y carreteras en costas bajas inundadas; daños menores a los muelles y atracaderos. Las embarcaciones menores rompen sus amarres en áreas expuestas.

Huracán Categoría II – 154 – 177 Km/h – Altamente destructivo

Vientos de 96 a 110 millas por hora (83 a 96 nudos). Presión barométrica mínima de 965 a 979 mb (28.50 a 28.91 pulgadas). Danos considerables a árboles y arbustos, algunos derribados. Grandes danos a casas móviles en áreas expuestas. Extensos danos a letreros y anuncios. Destrucción parcial de algunos techos, puertas y ventanas. Pocos danos a estructuras y edificios. Marejadas de 6 a 8 pies sobre lo normal. Carreteras y caminos inundados cerca de las costas. Las rutas de escape en terrenos bajos se interrumpen 2 a 4 horas antes de la llegada del centro del huracán. Danos considerables a m$ Las marinas se inundan. Las embarcaciones menores rompen amarras en áreas abiertas. Se requiere la evacuación de residentes de terrenos bajos en áreas costeras.

Huracán Categoría III – 178 – 209 Km/h – Extremadamente Destructivo

Huracán Sandy (C3), en Jamaica, 2012.

Huracán Sandy (C3), en Jamaica, 2012.

Vientos de 111 a 130 millas por hora (96 a 113 nudos). Presión barométrica mínima de 9415 a 964 mb (27.91 a28.47 pulgadas). Muchas ramas son arrancadas a los árboles. Grandes árboles derribados. Anuncios y letreros que no estén solidamente instalados son llevados por el viento. Algunos danos a los techos de edificios y también a puertas y ventanas. Algunos danos a las estructuras de edificios pequeños. Casas móviles destruidas. Marejadas de 9 a 12 pies sobre lo normal, inundando extensas áreas de zonas costeras con amplia destrucción de muchas edificaciones que se encuentren cerca del litoral. Las grandes estructuras cerca de las costas son seriamente dañadas por el embate de las olas y escombros flotantes. Las vías de escape en terrenos bajos se interrumpen 3 a 5 horas antes de la llegada del centro del huracán debido a la subida de las aguas. Los terrenos llanos de 5 pies o menos sobre el nivel del mar son inundados por más de 8 millas tierra adentro. Posiblemente se requiera la evacuación de todos los residentes en los terrenos bajos a lo largo de las zonas costeras.

Huracán Categoría IV – 210 – 249 Km/h – Extremadamente Destructivo*

Huracán Dennis, antes de ser categoría 4 en 2005.

Huracán Dennis, antes de ser categoría 4 en 2005.

Vientos de 131 a 155 millas por hora (114 a 135 nudos). Presión barométrica mínima de 920 a 944 mb (27.17 a 27.88 pulgadas) Árboles y arbustos son arrasados por el viento. Anuncios y letreros son arrancados o destruidos. Hay extensos danos en techos, puertas y ventanas. Se produce colapso total de techos y algunas paredes en muchas residencias pequeñas. La mayoría de las casas móviles son destruidas o seriamente dañadas. Se producen, marejadas de 13 a 18 pies sobre lo normal. Los terrenos llanos de 10 pies o menos sobre el nivel del mar son inundados hasta 6 millas tierra adentro. Hay grandes danos a los pisos bajos de estructuras cerca de las costas debido al influjo de las inundaciones y el batir de las olas llevando escombros. Las rutas de escape son interrumpidas por la subida de las aguas 3 a 5 horas antes de la llegada del centro del huracán. Posiblemente se requiera una evacuación masiva de todos los residentes dentro de un área de unas 500 yardas de la costa y también de terrenos bajos hasta 2 millas tierra adentro.

Huracán Categoría V – 249 + Km/h – Exageradamente Destructivo

Huracán Andrew, el 3ro más costoso en USA, 1992.

Huracán Andrew, el 3ro más costoso en USA, 1992.

Vientos de más de 155 millas por hora (135 nudos). Presión barométrica mínima por debajo de 920 Mb (27.17 pulgadas). Árboles y arbustos son totalmente arrasados por el viento con muchos árboles grandes arrancados de raíz. Danos de gran consideración a los techos de los edificios. Los anuncios y letreros arrancados, destruidos y llevados por el viento a considerable distancia, ocasionando a su vez más destrucción. Daños muy severos y extensos a ventanas y puertas. Hay colapso total de muchas residencias y edificios industriales. Se produce una gran destrucción de cristales en puertas y ventanas que no hayan sido previamente protegidos. Muchas casas y edificios pequeños derribados o arrasados. Destrucción masiva de casas móviles. Se registran mareas muy superiores a 18 pies sobre lo normal. Ocurren danos considerables a los pisos bajos de todas las estructuras a menos de 15 pies sobre el nivel del mar hasta mas de 500 yardas tierra adentro. Las rutas de escape en terrenos bajos son cortadas por la subida de las aguas entre 3 a 5 horas antes de la llegada del centro del huracán. Posiblemente se requiera una evacuación masiva de todos los residentes en terrenos bajos dentro de un área de 5 a 10 millas de las costas. Situación caótica.

* Esta escala se basa en la intensidad actual de los huracanes y es utilizada en los países de América del Norte, el Caribe, Centro América y el norte de Sudamérica.

Nueva escala Saffir-Simpson

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) ha hecho pública unamodificación en la escala de Huracanes Saffir-Simpson, la cual mide la intensidad de vientos de los ciclones tropicales cuando alcanzan la categoría de huracán. Dicha escala va desde 1 (menor intensidad de vientos) a 5 (mayor intensidad de vientos y por tanto de grado potencial de daños).

Nueva escala Saffir Simpson.

Nueva escala Saffir Simpson.

Esta modificación, se realiza con el objetivo de realizar una conversión de las unidades de medida empleadas para estimar la velocidad del viento más sencilla. Puesto que se suelen emplear kilómetros por hora (Km/h), nudos (kt) y millas por hora (mph), la anterior escala inducía a errores a la hora de redondear los valores de velocidad del viento en los límites entre las distintas categorías.

Distribución de los Huracanes

  Como las temperaturas del mar tienen que estar a más de 80 F, los huracanes se van a formar en diferentes lugares en diferentes meses del año, por lo general en la época más calurosa. Los huracanes ocurren en todas las áreas oceánicas tropicales excepto el Atlántico Sur y el Pacífico Sur.  

Distribución de los huracanes en el mundo.

Distribución de los huracanes en el mundo.

        Recuerden que el huracán necesita mucho océano para cobrar fuerza y para nutrirse, y se mueve con la rotación de la tierra hacia el oeste. Eso implica que se va a formar en donde puedan correr sin ser interrumpido y debilitado por tierra firme. Hay ondas  tropicales formándose todo el tiempo, pero no todas tienen las condiciones y el  espacio para cobrar fuerza.

FRECUENCIA

En un año normal se originan en el mundo alrededor de 60 huracanes, siendo mucho más frecuentes en el Pacífico Noroeste (Filipinas y Japón).

VELOCIDAD

La velocidad de desplazamiento de un huracán es de aproximadamente 20 km/h, pero puede variar en forma considerable y brusca. Un ser humano camina a una velocidad de 4 a 5 km/h.

Temporada de Huracanes

Existe un patrón general más o menos constante, pero que puede variar según las condiciones meteorológicas.

     En el Atlántico, Caribe y Golfo de México comienza el 1° de Junio de cada año, debido al calentamiento del agua durante el verano, y se extiende hasta el 30 de Noviembre, aunque puede haber huracanes todo el año (excepto Marzo). En el Golfo de México y El Caribe Occidental, por ser aguas más tranquilas, el calentamiento precede al resto, originándose allí los primeros sistemas ciclónicos de la temporada.

Tifon Categoría 4, en el Pacífico norte.

Tifon Categoría 4, en el Pacífico norte.

     A medida que avanza el verano el sol se va desplazando a latitudes más boreales (hacia el norte) de modo que los huracanes se producen al norte del Caribe y se desplazan, merced al movimiento rotacional de la Tierra, hacia el Oeste, arribando frecuentemente a la costa Este de Estados Unidos después de haber pasado por los países caribeños, especialmente Puerto Rico, Cuba, Las Bahamas, etc. Primero arriban en la costa de Florida y, a medida que avanza el verano (Agosto – Septiembre) y según la potencia del huracán, pueden llegar a los estados centrales de EE.UU e incluso a los más norteños de la costa atlántica y avanzar continente adentro.  Al final de la temporada, cuando el agua se comienza a enfriar otra vez, los huracanes se forman nuevamente en el Caribe y el Golfo.

     En el Océano Pacífico, debido a la corriente fría de Humboldt, la temperatura del agua rara vez excede los 80°F, de manera que los huracanes no son frecuentes. La «Corriente del Niño”, que aumenta la temperatura oceánica puede constituir una excepción. El desplazamiento hacia el Oeste (por la rotación de la Tierra, como ya mencionamos) de los huracanes disminuye aún más las probabilidades de que alguno arribe a las costas de Chile, Perú o Ecuador. Mucho más probable, como señalamos al inicio, es que se originen más al Norte y se desplacen hacia Asia afectando a Japón, Hong Kong, Filipinas, etc.

Los peores huracanes de la historia

Los daños que provocan los huracanes pueden ser catastróficos y destruir ciudades enteras. Dependiendo de la categoría que alcance en la escala de Saffir-Simpson el daño que provoque un huracán puede ser mayor o menor, aunque siempre hay que tomar precauciones y saber qué hacer en caso de huracán manteniéndonos en contacto con los servicios metereológicos de nuestra zona, que nos informarán de las previsiones y las alertas, si existe alguna.

      El daño del huracán se mide por el número de muertos, por la intensidad, por la presión y por las pérdidas económicas que sufre la región en la que se produce. Además las consecuencias de los huracanes pueden ser inundaciones y deslaves.

Actualmente parecen llegar con más potencia los desastres de la naturaleza. En los últimos tiempos este tipo de fenómenos se multiplican en el mundo entero y muchos hablan de que en el futuro la situación será peor. 

Hablamos de los peores huracanes de la historia, tanto de la vertiente del Pacífico como de la vertiente del Atlántico, porque son los que mayores daños han causado.

      Los huracanes siempre han estado presentes y las causas que los provocan  han formado parte de leyendas ancestrales durante siglos. “Hurakán” era el dios maya de las tempestades y “Tifón” fue un dios griego que se enfrentó a Zeus. 

      Hay huracanes que producen más daños que otros y debido a la gran devastación que pueden provocar se ha elaborado un plan de actuación en caso de huracanes.

     Para saber los daños que pueden causar los huracanes es conveniente conocer la escala de Saffir-Simpson  ya que los peores suelen alcanzar la categoría 5 de esta escala. Además, el nombre de estos huracanes devastadores suele eliminarse de las listas de nombres que se elaboran para los huracanes de los siguientes años.

   El número de catástrofes meteorológicas parece aumentar como así también el porcentaje de damnificados. Además de la muerte de miles de personas las pérdidas también consisten en gente sin hogar, sin alimentos y sin trabajo. Los meteorólogos empezaron a nombrar los huracanes y tormentas tropicales para permitir facilidad de comunicación entre ellos y el público en general en áreas relacionadas con las previsiones, avisos y peligros.

      A continuación se muestran los huracanes más significativos de la vertiente del Atlántico y de la vertiente del Pacífico. 

1780, El Gran Huracán

       El Gran Huracán, también conocido como el huracán San Calixto II, ocurrió del 10 al 16 de octubre de 1780 y es para la mayoría el huracán más destructivo de la historia en la cuenca atlántica, con el mayor número de víctimas mortales de los que tenemos datos. No se tiene constancia del nivel que adquirió, ni de la velocidad a la que soplaba el viento, pero las consecuencias de este huracán exceden ampliamente las consecuencias de otros ocurridos después en el Atlántico, también muy destructivos.

     El huracán azotó las Islas Martinica, San Eustaquio y Barbados posiblemente con vientos que superaban los 320 km/h (200 mph). Dejó a su paso la escalofriante cifra de 27.500 muertos. Muchas de las muertes ocurrieron en el mar, entre las flotas de navíos españoles y holandeses, pero especialmente entre franceses y británicos que se encontraban en el Mar Caribe debido a la Revolución Americana.

      La tormenta se originó en el Mar Caribe, al parecer en la zona de las islas de Cabo Verde, y tardó dos días en llegar a Barbados. Allí los relatos de la época cuentan que el viento era tan violento que gritando no se podían oír ni ellos mismos y que arrancó la corteza de los árboles antes de tirarlos. Todas las casas quedaron destrozadas

      En Santa Lucía se sabe que una flota británica, que se dirigía desde Nueva York a las Indias Occidentales, perdió ocho naves de guerra, del total de 12 que habían zarpado. Muchos de los barcos que se encontraban en el puerto rompieron sus amarras y acabaron entrando en el pueblo. Uno de estos barcos destrozó el hospital. La isla fue devastada hasta tal punto, que un explorador británico enviado para calibrar los daños, pensó que un terremoto acompañó a la tormenta. En Martinica el terrible huracán causó 9.000 muertes, con una marejada ciclónica de 7,6 metros de altura. En San Eustaquio, hubo entre cuatro y cinco mil. Después de arrasarlas avanzó hasta Puerto RicoLa Española y Florida. La última vez que se observó fue el 20 de octubre en la Isla de Terranova, Canadá.

1900, Huracán Galveston

      El Huracán Galveston tuvo lugar en TexasEstados Unidos, el 8 de septiembre del año 1900. Se estima que alcanzó vientos de 217 km/h , con una categoría 4 en la escala Saffir-Simpson. Causó grandes pérdidas en vidas humanas, que se calculan entre 6.000 y 12.000 personas. La cifra de los informes oficiales es 8.000, el 20% de la población total de la isla en aquella época, situando a éste huracán en el tercer puesto en número de muertos de los huracanes del Atlántico, por detrás del Gran Huracán de 1780 y el Huracán Mitch de 1998. En 1900 aún no se había puesto en práctica asignar al huracán un nombre de una lista, en la que se establecen los nombres de los huracanes de cada año en períodos de 6 años, por eso al huracán Galveston también se le conoce con otros nombres, como el Gran Huracán Galveston o la Inundación Galveston y, de manera local, como La Gran Tormenta o la Tormenta de 1900.

      En el año 1900 el punto más alto de la ciudad de Galveston solamente tenía 2,7 metros de altura sobre el nivel del mar. El huracán provocó una marejada ciclónica de 4,6 metros que literalmente arrasó la isla entera. La marejada golpeó y arrancó hasta los cimientos de los edificios haciéndolos añicos. Unas 3.600 casas fueron destruídas, creando un muro de escombros de cara al océano. Las pocas casas que lograron resistir son ahora mismo una atracción turística.

      Al igual que los severos daños en las construcciones de la ciudad, el total de víctimas mortales fue muy alto. Debido a que se destruyeron los puentes y las líneas de telégrafos, no llegaron noticias de la destrucción. A las 11 de la mañana del 9 de septiembre, uno de los pocos barcos que consiguieron persistir en el muelle de Galveston, el Pherabe, llegó a la ciudad de Texas, al oeste de la Bahía de Galveston, con seis mensajes desde la ciudad. Desde Texas se informó a William McKinley, presidente de los Estados Unidos, con un telegrama en el que se decía que la ciudad de Galveston estaba en ruinas y que se estimaban unas 500 víctimas mortales, algo que consideraron como una exageración del momento, y muy lejos de la realidad, pues el número total de víctimas mortales se calcula en un mínimo de 6.000 personas.

      Los ciudadanos de Houston conocían el tremendo poder destructor de los huracanes y rápidamente acudieron para proveer asistencia. Los rescatadores encontraron una ciudad totalmente asolada, donde la mayoría de las víctimas habían muerto ahogadas o golpeadas por la marejada ciclónica. Mucha gente murió más tarde atrapada entre los escombros de los edificios derruidos. Unas 30.000 personas se quedaron sin hogar. Los cuerpos eran tan numerosos que no era posible enterrarlos todos, y muchos fueron inicialmente lanzados al mar, pero el mar acabó por devolverlos a las costas, así que se tuvo que optar por quemarlos en piras funerarias que ardieron durante semanas. La situación era tan desesperante que las propias autoridades repartieron whisky entre las cuadrillas de trabajadores, que se veían en la situación de tener que tirar al fuego los cuerpos de sus mujeres e hijos.

1969, Huracán Camille

      El Huracán Camille es, junto con los huracanes Galveston y Katrina, el huracán más intenso que han visto los Estados Unidos. Alcanzó una velocidad sostenida de 320 km/h y una presión atmosférica de 905 milibares. Azotó Mississippi, Luisiana, en agosto de 1969 y alcanzó la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson. Causó daños catastróficos al impactar cerca de la desembocadura del Río Mississippi durante la noche del 17 de agosto. En total tuvo 259 víctimas mortales y causó daños por 1.420 millones de dólares.

      La tormenta se había formado el 14 de agosto y se fue intensificando muy rápidamente. Pasó bordeando la región occidental de Cuna con una fuerza de Categoría 3. En el Golfo de Méxicocogió más fuerza y tocó tierra con una presión mínima central de 905 hPa y vientos sostenidos de 305 km/h, con una marejada ciclónica de 7,3 metros de altura. Luego se extendió por la costa de Mississippi causando inundaciones y muertes tierra adentro, al pasar las montañas Apalaches de Virginia. 

       El Centro Nacional de Huracanes (National Hurricane Centre) avisó a los residentes en la Isla de Pines, al oeste de Cuba, para que se preparasen para vendales y fuertes vientos, lluvías torrenciales y subidas de marejada. La tormenta obligó finalmente a la evacuación de miles de personas a lo largo de las costas de Cuba y las islas Pines. El día 15 de agosto el huracán Camille se encontraba a 180 km de Florida, entre Apachicola y la playa del fuerte Walton. Al día siguiente se subió el nivel de alarma y miles de personas fueron evacuadas tierra adentro. Durante el 16 de agosto, el servicio meteorológico subió el nivel de alarma nuevamente pero mucha gente rehusó abandonar sus casas y no creyeron que pudiera haber inundaciones de 6 metros. En esa misma tarde se ordenó evacuar a los prisioneros de Gulfport pero nadie pudo salir de allí.

      El huracán Camille llegó a la costa con una categoría 5 causando daño y destrucción a lo largo de la Costa del Golfo de los Estados Unidos. Debido a que se movió rápidamente por la región, Camille sólo causó precipitaciones moderadas en muchas áreas. Aunque el área destruída en el condado de Harrison, Mississippi, fue de 180 km cuadrados.

      En los días posteriores al paso del huracán por Cuba, el gobierno desplegó equipos médicos en las regiones afectadas para vacunar contra la fiebre tifoidea ya que existían altos riesgos de diseminación de enfermedas debido a las inundaciones y las condiciones de humedad.

    En el Golfo de México, el huracán produjo olas de hasta 21 metros. El huracán Camille movió inluso el fondo del océano. Dichas circunstancias, junto con el fuerte viento y el oleaje destruyeron tres plataformas petrolíferas. Los daños de la industría petrolífera se estimaron en 100 millones de dólares. Hubo cortes de luz mientras se acercaba a línea de costa de Mississippi. La autopista 90 de los Estados Unidos se inundó. Los incendios consumieron urbanizaciones costeras, se produjeron marejadas de  7,3 metros y la destrucción fue casi completa.

      La respuesta tras la tormenta implicó fuerzas y organizaciones a todos los niveles. Se administró y coordinó un programa para desastres, que proveyó comida y refugio a los damnificados al día siguiente. El 19 de agosto se declararon zonas catastóficas Misisipi y Luisiana. El presidente Nixon envió 1.450 tropas regulares y 800 ingenieros de la Armada de los Estados Unidos que llevaron toneladas de comida, vehículos y transporte aéreo. Los voluntarios y el ejército se encargaron de encontrar a los supervivientes y hacerse cargo de los cadáveres. Se dictaron estrictas leyes urbanísticas durante el proceso de reconstrucción. 

      La devastación del huracán Camille inspiró la implementación de la escala de huracanes Saffir-Simpson y el nombre Camille se quitó de la lista de nombres de huracanes  que se usan cada año. Nunca se eligió un nombre para sustituirlo, pues se creó una nueva lista para las temporadas de huracanes en el Atlántico de los años 1971-1980.

1970, Ciclón Bhola en Bangladesh

      El ciclón Bhola de Bangladesh es el mayor desastre tropical del que se tiene constancia. Fue un devastador ciclón que asoló el este de Pakistán (ahora Bangladesh) y el oeste de Bengala(India), los días 12 y 13 de noviembre de 1970, aunque se formó en la Bahía de Bengala sobre el 8 de noviembre. Es el ciclón tropical registrado que más muertes  ha causado, y uno de los mayores desastres naturales de los tiempos modernos. La combinación de unos fuertes vientos de hasta 190 km/h, con una tormenta tropical, fue terrible para la zona. Al menos hubo 300.000 muertos, aunque se cree que pudieron ser más ya que según otras fuentes la cifra aumenta hasta las 500.000 víctimas mortales. Dejó en la más absoluta miseria a las regiones de Chittagong y Khulna. El Ciclón Bhola debe su nombre a una de las islas que destruyó. Al menos desaparecieron 100.000 personas y tras la catástrofe hubo una epidemia de cólera que acabó con miles de vidas. Su equivalente en la escala de huracanes Saffir-Simpson sería la categoría 3.

       El ciclón se formó sobre la Bahía de Bengala el 8 de noviembre y viajó al norte, intensificándose. El gobierno indio recibió informes desde la Bahía de Bengala que alertaban sobre un ciclón, pero debido a las malas relaciones con Pakistán, no informó a dicho gobierno. Llegó a vientos de 185 km/h el 12 de noviembre, e hizo tierra en la costa de Pakistán del Este por la noche. La mayoría de la población fue sorprendida por el ciclón ya que no hubo indicaciones por parte del sistema de alarma de tormentas que existía en el país, que no fue usado adecuadamente, lo que costó miles de vidas. Las marejadas ciclónicas entraron tierra adentro, aniquilando casas y destruyendo cultivos a lo largo de la región. Quedaron severamente afectadas Thana y Tazumuddin, con un total de víctimas mortales de más del 45% de la población, estimada en el momento en 167.000 habitantes.

      Al día siguiente de la devastación de la costa, tres barcos cañoneros y un barco hospital pakistaníes llevaron personal médico y suministros desde Chittagong a las Islas de Hatia,Sandwip y Kutubdia. En los dos días siguientes llegaron más barcos de la armada pakistaní. El presidente de Pakistán, Yahya Khan, volvió de un viaje oficial a China y recorrio el área, el 16 de noviembre. Una semana después del ciclón, el presidente Khan reconoció que su gobierno tuvo «deslices» y «errores» y que hubo una falta de comprensión de la magnitud del desastre, pero no aplazó las elecciones generales previstas para el 7 de diciembre.

      El gobierno pakistaní fue muy duramente criticado por la mala gestión de la situación de emergencia y de la  atención a las víctimas, que se consideró prácticamente nula. Esto fue determinante en los sucesos políticos que acontecieron en Bangladesh tras el ciclón. La aplastante victoria de la oposición del partido político Liga Awami, llevó a Bangladesh a independizarse de Pakistán y a proclamar la República Popular de Bangladesh en 1971, tras una guerra secesionista contra el Ejército pakistaní en la que intervinó la decisiva ayuda del gobierno de la India.

      La ayuda internacional fue decisiva para el rescate de las víctimas. La India fue uno de los primeros países que ayudaron a Pakistán, a pesar de las malas relaciones entre ambas naciones, con una ayuda económica considerable. Las autoridades pakistaníes no permitieron que la ayuda India entrará en Pakistán del Este, Bangladesh, por aire y obligó a su transporte por carretera. Los Estados UnidosCanadáAlemania del Este, la Unión SoviéticaChina y otros tantos países, enviaron ayuda logística, transporte aéreo, personal médico y suministros. El Banco Mundial calculó que la reconstrucción costaría $185 millones de la época y aportó 25 millones. Para principios de diciembre de ese mismo año, se habían alcanzado cerca de $40 millones en ayuda por parte de países, organizaciones y grupos privados de todo el mundo.

      En los años siguientes se llevaron a cabo proyectos para la prevención de los ciclones, por parte de la Liga de Sociedades de la Cruz Roja, que actualmente coordinan la Sociedad de la Media Luna Roja de Bangladesh y el propio Gobierno de Bangladesh. Se construyeron sistemas de alerta y refugios para ciclones que han sido de vital importancia en los ciclones que han azotado Bangladesh en los años posteriores.

1988, Huracán Gilbert

     El Huracán Gilbert, conocido también como huracán Gilberto, Huracán del Siglo (XX), y en Cuba como El Huracán Asesino, es otro de los huracanes registrados más devastadores que ha conocido la vertiente atlántica. Este ciclón golpeó durante 9 días el Caribe y el Golfo de México en septiembre de 1988. 

      Gilbert se formó el 8 de septiembre de 1988 cerca de las Islas de Barlovento. Se convirtió en tormenta tropical  al desplazarse sobre aguas cálidas del Caribe. Se intensificó hasta convertirse en un huracán importante el día 10 de septiembre y tocó tierra por primera vez en Jamaica, siendo ya un huracán de categoría 4 en la escala de Saffir-Simpson, con unos vientos de 240 Km/h (149 millas por hora). Mientras se alejaba de Jamaica, el huracán Gilbert se intensificó y se convirtió en huracán de categoría 5 cuando atravesaba Gran Caimán. Gilbert siguió empeorando hasta alcanzar unos vientos de 296 Km/h y una presión mínima de 888 milibares, que era la más baja registrada hasta ese momento.

   La velocidad de sus vientos sólo la supera el huracán Camille (1969) y el huracán Allen (1980) y la presión que estableció no ha bajado hasta 2005 cuando elhuracán Wilma estableció un nuevo récord con 882 milibares. La segunda vez que Gilbert se posó en tierra fue en la península de Yucatán, el 14 de septiembre, como huracán de categoría 5. Provocó inundaciones en el norte de México antes de llegar a los Estados Unidos y desaparecer. 

   El huracán Gilbert dejó a su paso 341 muertos, la mayoría en Mexico, y unos daños estimados para los territorios afectados de 5,5 billones de dólares de la época. En el norte de Venezuela el huracán Gilbert produjó inundaciones que mataron 5 personas. En Jamaica una ola ciclónica de casi 6 metros y las copiosas precipitaciones provocaron inundaciones tierra adentro en las que murieron 45 personas y un niño recién nacido, convirtiendo al huracán Gilbert en el peor huracán que ha asolado Jamaica desde el huracán Charlie en 1951. Las pérdidas se estimaron en 4 billones de dólares de la época. Además destrozó cultivos, edificios, casas y carreteras e incluso una avioneta que quedó hecha añicos.

      En las Islas Caimán el huracán pasó a 48 km de la zona sur con ráfagas de viento de 253 km/h el 13 de septiembre. Sin embargo la isla escapó del daño destructor del huracán, debido a que la profundidad del agua que la rodeaba no permitió que la ola ciclónica alcanzará mucha altura, quedándose en una altura de 1,5 metros. No obstante casas, cultivos, árboles y pastos quedaron en ruinas.

      En México unas 35.000 personas se quedaron sin hogar y 83 barcos se hundieron cuando el huracán Gilbert llegó a la península del Yucatán. Los daños se estimaron entre 1 y 2 billones de dólares de la época. En la región de Cancún se calculan pérdidas en turismo de 87 millones. En el nordeste de Mexico, las copiosas lluvias en Monterrey causaron inundaciones. Unas 100 personas murieron en cinco autobuses que los estaban evacuando.

   En los Estados Unidos el huracán llegó por Texas, donde hubo daños menores cuando el Gilbert tocó tierra. Se formaron tornados en el área de San Antonio y se registraron fuertes precipitaciones en Oklahoma.

       El nombre Gilbert fue retirado y reemplazado por Gordon porque los nombres de los peores huracanes se eliminan de las listas de nombres de huracanes.

1989, Hugo

El Huracán Hugo fue un devastador huracán categoría 5 que impactó Puerto RicoSaint Croix (las Islas Vírgenes de los Estados Unidos) y el estado de Carolina del Suren 1989, matando a más de 50 personas. La tormenta causó miles de millones de dólares en daños (principalmente en Carolina del Sur), y a la fecha sigue estando entre los huracanes más costosos de la historia.

Se reportaron daños muy severos en las islas caribeñas. El huracán mató a seis personas en Puerto Rico y Saint Croix. Se estima que los daños totales en las islas de lCaribe fueron de 3.000 millones de dólares, de los cuales mil millones corresponden solamente a Puerto Rico y las Islas Vírgenes.

Hugo dejó 7.000 millones de dólares en daños en los Estados Unidos. En su momento fue el huracán más costoso en la historia de los Estados Unidos, pero fue superado tres años después por el huracán Andrew, y años después por otras tormentas.

1991, Ciclón de Bangladesh

      Este ciclón de Bangladesh tuvo vientos de 260 Km/h, alcanzó la categoría 5. Es el segundo en número de muertos, sólo por debajo del ciclón Bhola, la mayoría en la zona de Chittagong. La tormenta provocó una marejada ciclónica de 6 metros que entró tierra adentro, matando al menos a 138.000 personas y dejando a 10 millones de personas sin hogar.

                         
      Un área de nubes persistentes, debido en parte al monzón, se desarrolló en una depresión tropical  el 22 de abril en la Bahía de Bengala. La velocidad del viento aumentó y la depresión se convirtió en tormenta tropical el 24 de abril, moviéndose lentamente en dirección noroeste, convirtiéndose en ciclón para el 27 de abril y creciendo en fuerza para el 28 por la presencia de aguas calientes.

    El día 29, el sistema incrementó su velocidad aún más en dirección nor-noroeste, intensificándose con una equivalencia en la escala de huracanes Saffir-Simpsonde Categoría 5. Llegó rápidamente a tierra y se acabó disipando para el 30 de abril en el sudeste de Asia.

   Muchas muertes fueron por ahogamiento, con una mayor mortalidad entre niños y ancianos. Aparte de la población que fue a los refugios para ciclones construidos después del ciclón Bhola de 1970, hubo una gran mayoría que no fue avisada con tiempo o no sabían dónde podían refugiarse. Algunos que conocían que había emergencia por ciclones, rehusaron la evacuación porque no creían que la tormenta fuera tan fuerte como se pronosticaba. Pero al menos se evacuaron 2 millones de personas de las zonas donde el ciclón tuvo un mayor impactó, lo que sin duda mitigó las pérdidas humanas.

      El ciclón provocó daños estimados en 1,5 billones de dólares americanos de la época. La gran velocidad del viento y la marejada ciclónica devastaron la línea de costa. Al menos 1 millón de casas fueron destruídos y dejaron a 10 millones de personas sin hogar. Las bases navales y militares de Bangladesg quedaron muy afectadas. En el Puerto de Chittangong el ciclón levantó una grúa de 10 toneladas que impactó en el puente del río Karnaphuli, partiéndolo por la mitad. Un gran número de barcos y navíos se hundieron o se fueron a la deriva.

       Muchos países colaboraron con ayuda humanitaria. Los Estados Unidos montaron un dispositivo militar conocido como operación «Sea Angel» y enviaron 15 barcos y 2.500 personas, que provenían directamente de las operaciones llevadas a cabo en la Guerra del Golfo, con suministros de alimentos, agua, y recursos para la atención médica, convirtiéndose en uno de los mayores esfuerzos militares de ayuda humanitaria jamás llevado a cabo, en el que también participaron Reino UnidoChinaJapónIndia y Pakistán. Se calcula que se salvó la vida de al menos 200.000 personas.

1992, Andrew

El Huracán Andrew ha sido uno de los más destructivos que hayan impactado en Estados Unidos. Entre el 16 y el 28 de agosto de 1992, impactó las islas del noroeste de las Bahamas, el área de Miami en la península de Floriday el sur de LuisianaAndrew dejó pérdidas de 45 mil millones de dólares (la mayor parte de estos daños fueron para el sur de Florida) y es el segundo huracán más costoso de la historia (después del huracán Katrina del año 2005).

Con la furia de sus vientos arrasó el sur de la Florida, dejando 18 millas de miseria, destrucción y tragedia. Los vientos y la lluvia se llevaron a su paso ventanas, paredes, balcones y hasta las fachadas completas de algunos edificios.

Expertos del Centro Nacional de Huracanes de Miami, analizaron los datos recopilados en 1992, y concluyeron que los vientos sostenidos del huracán Andrew oscilaron entre232 y 264 kilómetros por hora. Es decir que diez años después este huracán fué catalogado en la escala de 5

1998, Huracán Mitch

El huracán Mitch es el segundo huracán más mortífero de la vertiente atlántica del que se tiene constancia, con unos vientos sostenidos de 290 Km/h como velocidad máxima. Este huracán dejó tras de sí a 18.000 muertos en América Central entre el 22 de octubre y el 5 de noviembre de 1998. Sólo ha sido superado en número de muertos por el Gran Huracán de 1780. Causó unas pérdidas económicas de miles de millones de dólares.

     El Mitch se formó a partir de una onda tropical en el Atlántico, pronto pasó a ser depresión tropical y más tarde tormenta tropical. Fue en ese momento cuando se le asignó el nombre de Mitch. La tormenta tropical se transformó en huracán el 24 de octubre y a los 2 días ya había alcanzado la categoría 5 en la Escala Saffir-Simpson, con una presión de 905 milibares.

      El Centro Nacional de Huracanes monitoreó al huracán desde su formación en el Mar Caribe, y se pudieron evacuar 45.000 personas de las Islas de Bahía, en Honduras, preparándose un dispositivo acorde. Los gobiernos de Belice y Guatemala lanzaron una alerta roja y avisaron a los habitantes de cayos e islas para que se pusieran a salvo. Se evacuaron las zonas de las costas del Caribe, unas 100.000 personas en Honduras, 10.000 en Guatemala y 20.000 en el estado de Quintana Roo, México.

      En Honduras y Nicaragua se registraron las mayores precipitaciones de la historia, causando enormes inundaciones y corrimientos de tierra que se llevaron la vida de casi 11.000 personas, y dejaron unos 8.000 desaparecidos, convirtiendo al huracán Mitch en el segundo huracán más mortífero del Atlántico. Los daños de las inundaciones se calculan en 6 mil millones de dólares. El huracán provocó olas de hasta 6,4 metros en Honduras. El daño fue tan grande que se estima que se destruyó entre el 70 y el 80% de la infraestructura del país. 

      En Nicaragua el huracán Mitch no tocó tierra pero la gran cantidad de lluvias causaron en total unas 3.800 víctimas mortales, de las que unas 2.000 se produjeron en los pueblos El Porvenir y Rolando Rodríguez debido al deslizamiento de la ladera del volcán Casita, que los dejó sepultados en el lodo. Entre 500.00 y 800.000 personas se quedaron sin hogar.
      Tras el paso por las costas de Nicaragua y Honduras, el huracán Mitch se debilitó poco a poco hasta convertirse en un huracán de categoría 2. Siguió debilitándose hasta ser de nuevo una depresión tropical mientras pasaba sobre Guatemala el 31 de octubre. Pero se organizó y volvió a convertirse en tormenta tropical estando en el sur de México, pasando primero por Mérida en la península de Yucatán, y tocando tierra por última vez a su paso por Florida.

      En el Mar Caribe las olas alcanzaron hasta 4 m de altura y las ráfagas de viento hasta 67 km/h. Muchas zonas fueron evacuadas. Cuando el huracán Mitch llegó a Costa Rica, las copiosas precipitaciones provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra, destruyendo casas, dejando a 4.000 personas sin hogar y matando a 7 personas. En El Salvador hubo que evacuar a 500.000 personas y también se vió afectado por las inundaciones que dejaron a 59.000 sin hogar, causando 240 muertes y destrozando los cultivos y explotaciones agrarias.

      Tras el paso del devastador huracán Mitch, muchos países enviaron ayuda humanitaria y económica, en total unos 6.300 millones de dólares repartidos en toda Centroamérica. Se produjeron brotes de cóleraleptospirosis y dengue que se cobraron algunas víctimas más.

Este huracán dejó tras de sí a 18.000 muertos enAmérica Central entre el 22 de octubre y el 5 de noviembre de 1998. Sólo ha sido superado en número de muertos por el Gran Huracán de 1780

2005, Huracán Katrina

El huracán Katrina fue el segundo que alcanzó la categoría 5 en la Temporada de huracanes en el Atlántico en el año 2005

El 29 de agosto de 2005 el Huracán Katrina  arrasó las costas de Luisiana, Misisipi y Alabama con vientos de más de 240 kilómetros sumergiendo bajo las aguas del lago Portchtrain a Nueva Orleans
Días después la ruptura de varios diques provocó la inundación de 80 por ciento de la ciudad, dejando a su paso gran cantidad de muertos y daños materiales superiores a 81 mil millones de dólares.

El huracán Katrina ha sido calificado como el más catastrófico desastre natural de USA. Si los habitantes de Nueva Orleans hubieran contado con un plan de evacuación tal vez los daños hubiesen sido menores. 

Se formó sobre las Bahamas y comenzó siendo un huracán de categoría 1, tocando tierra en el norte de Miami por primera vez. Durante esta primera etapa el Katrina dejó 11 muertos y grandes inundaciones.
     A su paso por Nueva Orleans la ciudad quedó inundada en su mayoría. Tras pasar por Miami se debilitó y se convirtió en una tormenta tropical que a su paso por el Golfo de México y al mezclarse con las aguas cálidas del golfo se transformó en huracán de categoría 5, con vientos de 280 Km/h y 902 milibares de presión atmosférica.

      El 29 de agosto llegó a tierra entre Luisiana y Misisipi. Pocas horas antes de llegar a Nueva Orleans se ordenó la evacuación por parte de las autoridades ya que se preveía que fuera invadida por el agua al estar casi toda por debajo del nivel del mar. La previsión y los avisos de las autoridades públicas llegaron tarde ya que Nueva Orleans quedó prácticamente inundada y con un total de 1.836 víctimas mortales y 705 desaparecidos. Las consecuencias fueron diversas. Los sectores de la economía de Nueva Orleans se vieron afectados por culpa del Katrina; hubo problemas de salud pública debido al estancamiento y contaminación del agua y a los cadáveres. El vandalismo tomó un gran protagonismo porque la ciudad quedó abandonada y se terminaron las reservas de alimentos y de agua potable. La producción y el refinado de petróleo en la zona se paralizaron (en esta región se produce la mitad de la gasolina que se consume en Estados Unidos), en Luisiana un millón de personas se quedaran sin energía eléctrica y obligó también a que fueran desplazadas alrededor de 150.000 personas que se repartieron entre el estado de Texas, el de Luisiana y el de Mississippi.

Aunque las cifras oficiales hablan de 2.000 muertos, se estima que fueron muchos más. Casi medio millón de habitantes resultaron afectados por este huracán. 

2005, Wilma

Fué el huracán más intenso registrado en el Atlántico y el décimo ciclón tropical más intenso registrado en todo el mundo (ya que los otros 9 fueron tifones), con la presión más baja reportada en el hemisferio occidental, un récord que ostentaba el Huracán Gilbert

Además, Wilma fue el tercer huracán de categoría 5 registrado durante un mes de octubre, mientras que los otros dos fueron el Huracán Mitch de 1998, y el Huracán Hattie de 1961. La fuerza del huracán Wilma ha sido impresionante, pero los daños no son tantos por los vientos de más de 250 kilómetros por hora, sino por la lentitud de su paso sobre todo por el territorio mexicano.

El poderoso huracán Wilma se transformó en el más intenso de la historia en términos de presión barométrica, y desde sus comienzos apuntó hacia el estado norteamericano de Florida.

Wilma alcanzó tierra en más de una ocasión y provocó sus efectos más destructivos en la península mexicana de península de YucatánCuba y en la parte sur de la península estadounidense de la Florida.

2008, Ciclón Nargis

      El Ciclón Nargis fue un fuerte ciclón tropical que causó el peor desastre natural registrado en la historia de Birmania, oficialmente Unión de Myanmar. El ciclón llegó a la costa el 2 de mayo de 2008, causando una destrucción catastrófica y al menos 138.000 víctimas mortales. Solamente en el pueblo de Labutta se estima que murieron 80.000 personas, y sobre 10.000 en Bogale. Desaparecieron unas 55.000 personas. El gobierno no publicó cifras oficiales para minimizar el impacto político y es posible que la cantidad de víctimas mortales aumentara hasta 1 millón. Los daños se estimaron en 10 billones de dólares.

      Nargis se desarrolló sobre el 27 de abril en el área central de la Bahía de Bengala. Inicialmente se movió lentamente hacia el lado noroeste. El ciclón se vio rápidamente intensificado el 29 de abril con vientos de 165 km/h el 2 de mayo llegando a alcanzar los 215 km/h y convirtiéndolo en un ciclón de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson de huracanes cogió fuerza al llegar a la costa de Birmania, pasando por la mayor ciudad, Yangon (Rangoon), y disipándose más tarde en la frontera de Birmania con Tailandia.

Ciclones extra tropicales

Animación del Huracán Xynthia, en Europa.

Animación del Huracán Xynthia, en Europa.

      Aunque se ha dicho que los huracanes se producen en zonas tropicales, también se dan en otros sitios, y por otras razones: por ejemplo, los llamados ciclones extra tropicales, como el Xynthia, que se vivió en España, Francia y Portugal en febrero de 2010 o el Klaus, que pasó por España y Francia en enero de 2009. No han tenido la misma fuerza que las tormentas tropicales ni han causado los mismo daños, pero vamos a verlos un poco más en detalle, al menos para saber porqué en otras latitudes tampoco estamos a salvo.

      Un ciclón extra tropical, o borrasca (término que seguro que nos resulta más familiar), son zonas de la atmósfera donde la presión va menguando según nos acercamos a su centro y que se alimentan de energía. Como ya sabemos, en el caso de los ciclones tropicales, esta energía proviene de las cálidas aguas oceánicas. En el caso del Xynthia, provino del encuentro de una masa de aire fría con una cálida, provocando que la presión en su centro bajara muchos milibares rápidamente. A este encuentro de dos masas de aire con distintas temperaturas se le llama ciclogénesis explosiva. Se suele utilizar el término ciclón extra tropical, y no borrasca, cuando los vientos asociados superan los 120 km/h.

      En Europa no existe algo como el Centro Nacional de Huracanes que dé nombre a los huracanes, más que nada porque no son muy comunes. Aún así, el Instituto Alemán de Meteorología sí tiene costumbre de ponerles nombre, y de ahí han salido Klaus o Xynthia (nombres alemanes, obviamente). En Noruega también suelen nombrar a las tormentas que llegan a sus costas, con lo que a veces se producen confusiones.

Ciclón Klaus, en Francia y España, 2009.

Ciclón Klaus, en Francia y España, 2009.

      El ciclón extra tropical Klaus fue un ciclón que afectó sobre todo al norte de España y sur de Francia los días 23, 24 y 25 de enero de 2009. Se desplazó de oeste a este, desde las islas Azores hasta el Golfo de Génova pasando por el mar Cantábrico. Provocó vientos de más de 150 km/h y olas de hasta 26 metros. Se formó por una ciclogénesis explosiva, generando fuertes vientos y abundantes precipitaciones. El número de víctimas mortales ascendió a 31, 12 de ellas en España. 

     El ciclón extratopical Xynthia, o Cinthia, azotó el oeste de Europa entre el 26 y el 28 de febrero de 2010 y se originó en el Atlántico por una ciclogénesis explosiva. Cuando los servicios meteorológicos empezaron a dar la alerta, los medios de comunicación españoles hablaron de la «tormenta perfecta«, lo que es incorrecto. El término proviene de la expresión inglesa «Perfect Storm», nombre de un libro y una película que describían la ciclogénesis súper explosiva que se produjo entre el 24 y el 31 de octubre de 1991 en el Atlántico Norte, generando olas y vientos monstruosos y destruyendo el pesquero Andrea Gail. El Xynthia no fue así, y además las previsiones no fueron acertadas, al menos en España. En Francia causó la muerte de 51 personas, la mayoría de ellas cuando la fuerte marejada ciclónica, con olas de hasta 7 metros, destrozó el malecón de la ciudad costera de L´Aiguillon-sur-Mer. El ciclón también dejó sin electricidad a más de un millón de hogares en Francia y Portugal.

Aunque con frecuencia llegan a ser altamente destructivos, los huracanes forman parte importante del sistema de circulación atmosférica, que provoca el movimiento de calor de las regiones cercanas al Ecuador hacia mayores latitudes.

Fuentes de Información Electrónicas:

  1. Portal “PortalCiencia”, disponible en la web:  http://www.portalciencia.net/meteotor.html, consultado el 22 de enero de 2012.
  2. Portal “AngelFire”, diponible en la web: http://www.angelfire.com/nt/huracanes/, consultado el 22 de enero de 2012.
  3. Portal “Rankeen.com” disponible en la web: http://www.rankeen.com/Rankings/rank_fotos_huracanes.php, consultado el 6 de abril de 2012.
  4. Portal “Fino Consultores”, disponible en la web: http://www.finoconsultores.com/EXPAGES/escalasaffirsimpson.asp, consultado el 17 de julio de 2013.
  5. «Huracán.» Microsoft® Encarta® 2009 [DVD]. Microsoft Corporation, 2008.
  6. Portal “Huracanes Yucatán”, disponible en la web: http://www.huracanesyucatan.com/explicando/escala.htm#Huracán, consultado el 17 de julio de 2013.

Una respuesta a “Huracanes, tifones, ciclones tropicales o baguios

  1. Pingback: Huracanes, tifones, ciclones tropicales o baguios | Biblioteca de Investigaciones·

Los comentarios son bienvenidos. Te pido procures que tu comentario esté relacionado con el tema de la entrada y no olvides revisar la ortografía. Por favor, escribe con respeto y educación. Los comentarios que incumplan estas normas serán eliminados. ¡Gracias por comentar y vuelve pronto!

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.